sábado, 3 de septiembre de 2016

Los medios masivos: ¿un engaño de masas?

Por Mauro Milesi

La comunicación es la causa por la cual los ciudadanos que participan de la sociedad crean significados comunes sobre las prácticas que realizan. Los medios de comunicación juegan un papel fundamental en la creación de esos significados y por lo tanto en la construcción de poder. La pregunta de cómo los medios afectan la percepción de la realidad es un tema central en el estudio de la comunicación. Con la aparición y expansión global de internet y la posterior proliferación de las redes sociales y su extendido uso, han surgido nuevas miradas sobre la cuestión que es importante que tengamos en cuenta.
En ¿Qué agenda cumple la prensa?, Maxwell MacCombs y Dondald Shaw,  nos dicen que si bien existe plena conciencia de que el periodismo nos brinda información, podemos tener menos conciencia de cómo esa información moldea de algún modo nuestra manera de mirar la realidad.  Dicen los autores: “Este impacto de los medios masivos – la capacidad de efectuar cambios cognoscitivos entre los individuos, de estructurar su pensamiento- ha sido titulado como función establecedora de agenda de la comunicación masiva. En esto puede recibir el efecto más importante de la comunicación masiva, su capacidad para ordenar mentalmente y organizar nuestro mundo. Los medios masivos pueden no tener éxito en cuanto a decirnos qué pensar pero tienen un sorprendente éxito en cuanto a decirnos en qué pensar”.
 Esto es claro si nos detenemos a observar cuales son los temas de los que hablamos en el ámbito social. La información que manejamos es información que por lo general (salvo que seamos participes cercanos de los hechos) proviene de algún medio de comunicación. Lo escuchamos en la radio, lo vimos en la tele, o lo leímos en algún diario o en internet.
Sin embargo es necesario que seamos conscientes de que la información que nos presentan los medios no es necesariamente la realidad sino una mirada que ese medio realiza. La información que se presente sufre un proceso de selección jerarquización y ordenamiento consiente y es en ese proceso donde podemos decir que la realidad se construye. Allí se ponen en juego (implícita o explícitamente) diversos intereses de quienes brindan las noticias sobre un acontecimiento. Sin embargo la realidad en sí misma no es un relato. La realidad ocurre siempre en el presente, es el continuo devenir de nuestra acción en el presente. En ese caso podemos decir que cualquier relato que hagamos de ella (incluso cuando contamos una anécdota) estamos, de algún modo, construyendo una realidad. Es decir que no podemos atribuir a los medios de comunicación esta característica, sino que es propia del lenguaje. De esto se desprende la idea de que una noticia no puede ser objetiva porque está mediada por interese, pensamientos y vivencias que el periodista trae a la mano a la hora de escribir. Esa vieja premisa del periodismo de pretender ser objetivo es al menos un tanto pretenciosa, cuando no, falsa. La realidad no se crea en los medios de comunicación, en ellos solo se muestra una parte editada de ella.
Más allá de esto no debemos negar la importancia que los medios masivos ejercen en el desarrollo de una sociedad. Sin ir más lejos en nuestro país, al menos  desde 2008, fuimos testigos de la lucha por la hegemonía del poder mediático que se llevó a cabo entre el ex gobierno oficialista de los Kirchner y el Grupo Clarín. Esto llevó al terreno de lo público nociones que antes pertenecían a las esferas privadas del debate académico. La proliferación de programas de archivo manifiestamente oficialistas como TVR, Duro de Domar, 678 hicieron un esfuerzo por poner en evidencia la puesta en escena de los programas  pertenecientes al grupo Clarín. La frase “Clarín miente” fue eslogan y bandera de lucha de los sectores populares identificados con aquel gobierno. Si algo dejó en claro esta etapa de nuestra historia, más allá de las afiliaciones a uno u otro bando, es la manipulación que los medios ejercen de la información. Nadie que haya vivido esta etapa podrá leer una noticia sin poner un manto de duda sobre ella. Y aunque no sea de la mejor manera, es al menos un buen comienzo para empezar a hablar del rol que cumplen los medios en la sociedad y particularmente el periodismo como agente que busca la verdad.

El internet y un cambio de paradigmas
La incorporación de nuevas tecnologías al campo de la comunicación históricamente ha ocasionado grandes cambios en los procesos de producción, circulación, y recepción de la información. Sin embargo como dice Patrice Flichy “un nuevo medio nunca sale con todas sus armas del fértil cerebro del inventor”. Una vez lanzadas al público, las tecnologías pueden producir efectos impredecibles y alterar las costumbres y hábitos de la sociedad. Manuel Castells en El impacto de internet en la sociedad: una perspectiva global explica que “todo proceso de cambio tecnológico de envergadura genera una mitología propia. En parte porque se hace uso de él antes de que los científicos hayan podido evaluar sus efectos e implicaciones, y por ello siempre existe una distancia entre el cambio social y la comprensión del mismo”. La incorporación de internet como tecnología de comunicación ha revolucionado los tres aspectos centrales de la comunicación: producción, circulación, y procesamiento. Esos cambios generan opiniones encontradas y es importante que las analicemos.
Una de las características más interesantes que presenta internet es su posibilidad de estar conectados al instante desde casi cualquier parte del mundo. Esto rompe con las barreras de tiempo y espacio que presentaban como limitante los medios tradicionales. Permite transmitir información al instante lo que ha sido siempre una de las premisas del periodismo: la primacía de la noticia. Permite además disponer de un espacio sin límites a la hora de presentar la información.
Solamente estas dos características reconfiguran necesariamente la tarea de los medios (que deben adaptar sus formas de trabajo a las nuevas tecnologías si no quieren quedar fuera de competencia) y de los periodistas que deben tener un conocimiento de esas nuevas tecnologías.
Pero el internet cambia además la relación entre público y medio. Dice Castells: “El proceso de comunicación para toda la sociedad se fue desplazando desde la comunicación de masas a la autocomunicación de masas. Ello significa, pasar de un único mensaje enviado de uno a muchos con muy poca interactividad a un sistema basado en mensajes de muchos a muchos”. Podemos pensar entonces que el desarrollo tecnológico de las últimas décadas vino a democratizar la información.
Si tenemos en cuenta lo anteriormente dicho sobre la construcción del poder en la sociedad, las nuevas tecnologías de la comunicación brindan la posibilidad de romper con las viejas trabas que los medios ponían a la formación de agenda. Si uno dispone hoy de algún dispositivo conectado a la red puede obtener información de casi cualquier tema seleccionando sobre que, quien y como informarse. Si bien existen medios hegemónicos que siguen construyendo agenda, gracias al internet, podemos estar mucho más informados por diferentes fuentes acerca de las cuestione que nos interesan y no necesariamente aquello temas que los medios imponen. En todo caso será tarea del periodismo y de los medios recuperar la credibilidad perdida y preocuparse por adaptarse a las nuevas posibilidades que brinden las comunidades en red y a los tiempos que corren.

1 comentario:

  1. ¡Buenas tardes! al comienzo del texto, precisamente en la introducción, se puede encontrar pequeños problemas de redacción con el núcleo de lo que se quiere plantear. Después el escrito comienza a tomar una postura muy descriptiva y se plantean temas modernos muy interesantes para el lector, lo que hace que la lectura sea llevadera.
    Las citas utilizadas por el autor son acertadas, pero en algunos casos, como en la primera, es muy larga, y se uso 10 renglones de la cita, en donde al final, el autor del libro resume la idea en 3 renglones. Las citas están bien usadas en el texto, pero deberían ser más cortas, ya que estaría bueno que los autores de los libros den la idea clara e precisa y el escritor pueda dar su opinión sobre el fragmento. Me agrado mucho la parte en donde se explica "como se construye la realidad" creo que fue muy precisa la manera en la que se utilizaron las palabras. Me hubiera gustado poder leer más del autor del texto y no tantas citas que expliquen lo que se podía representar con ejemplos o descripciones de la realidad.

    Comentario: Cislaghi María de los Ángeles. 5/9/2016

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