sábado, 3 de septiembre de 2016

Internet y medios digitales: el antes y después de la noticia 
Florencia Cossi
    Con la evolución de la tecnología y la aparición de los nuevos medios el periodismo ha pasado por varios cambios a lo largo del tiempo, pero las preguntas son ¿la construcción de la noticia ha cambiado? ¿Los nuevos medios dan cuenta de nuevos periodistas distintos al de los medios tradicionales? ¿Hay otro tipo de periodismo? ¿Se prefiere más leer desde la web en vez del diario impreso? ¿Los medios nos marcan que debemos creer y que no? 
   Jesús Canga Larequi afirma que la tecnología es responsable de la aparición de los denominados “nuevos medios” y de los cambios que los mismos están originando en el trabajo diario de la profesión periodística. Estos nuevos medios surgen cuando las empresas periodísticas comenzaron con la búsqueda de un nuevo canal de distribución, como la adaptación a un nuevo soporte de un producto ya conocido, que se convirtió en un nuevo medio. Este nuevo medio añade dos elementos que, aún buscados desde los inicios del periodismo impreso, no habían podido incorporarse a la profesión hasta ahora: la inmediatez y la disponibilidad de un espacio casi infinito para publicar informaciones. Por primera vez en su historia, el periódico tradicional, un medio cuya característica esencial es la de ser un producto perecedero por naturaleza, puede plantearse la posibilidad de una actualización constante de sus contenidos. Ya no se trata exclusivamente de la transformación de un nuevo medio sin que desaparezca el original. Las empresas editoriales de periódicos han descubierto, gracias a internet, dos medios donde antes había uno. La aparición de internet como nuevo medio de comunicación ha vuelto a poner sobre la mesa el tema recurrente de la desaparición de la prensa.
    En la construcción de la noticia debe tenerse en cuenta antes de difundirla que el hecho existe, hay confirmaciones, y reporteros de fuerte reputación que la pueden difundir. Pero, en la prisa por llegar al público, pese a ese trabajo cuidadoso se pierde algo esencial. Furio Colombo en su texto “Cómo nace una noticia” define que hay que tomar consideración a la cuestión del número y enumera cuatro aspectos. El primer aspecto es el número de veces en que se repite ya por sí mismo prueba la relevancia de la noticia pero también es instrumento para el nacimiento de otras noticias derivadas de la noticia madre. Otro aspecto que enumera dice que cuanta más gente se apasiona por un tema, personaje o acontecimiento, más noticias serán generadas en torno a él. Un tercer aspecto en el que el número aparece en el universo de las noticias se refiere a la cantidad de personas implicadas en un acontecimiento. Ese número determina la importancia y repercusión de una noticia. Pero como cuarto aspecto, expresa que, hay otro factor de gran importancia en el nacimiento o en la fuerza con que circula una noticia: el número de periodistas presentes. O sea, las noticias viajan en pack, pero también los periodistas lo hacen. En este punto, es evidente que la noticia se multiplicó a causa del número de periodistas, afirma Furio Colombo.
    Con lo que respecta a si los medios marcan en que debemos creer y que no McCombs y Shaw hablan de una visón popular en la que la comunicación masiva ejerce tremenda influencia sobre los asuntos humanos. La capacidad de la televisión, los periódicos, las revistas, el cine, la radio y toda una multitud de nuevas tecnologías de la comunicación para la mente pública e influir de manera significativa en el flujo de la historia, es un poder ampliamente aceptado. Se ha acumulado una considerable evidencia de que los editores y transmisores desempeñan una parte importante en la modelación de nuestra realidad social cuando realizan su tarea cotidiana de elegir y exhibir las noticias. Este impacto de los medios ha sido rotulado como la función establecedora de agenda de la comunicación masiva. En esto puede residir el efecto más importante de la comunicación masiva, su capacidad para ordenar mentalmente y organizarnos nuestro mundo. en suma, los medios masivos pueden no tener éxito en cuanto a decirnos qué pensar pero tienen un sorprendente éxito en cuanto a decirnos en qué pensar. La prensa hace más que llevar estas cuestiones a un nivel de conciencia política entre el público. La idea del establecimiento de agenda afirma que las prioridades de la prensa en alguna medida se convierten en prioridades del público. Lo que la prensa acentúa a su vez es acentuado privada y públicamente por los públicos de la prensa.
    Volviendo al internet y la prensa Jesús Canga Larequi afirma que parece evidente que, desde una óptica aplicable a las empresas periodísticas, la evolución de internet hasta ahora se ha caracterizado por la sucesión de tres fases claramente diferenciadas dese su aparición: la primera fase respecta a que en un primer momento se produce lo que podemos denominar la “seducción tecnológica”. La red atrae por su capacidad de poder transmitir todo tipo de información de forma rápida y barata, como un nuevo canal de distribución. La segunda fase se caracteriza por la “seducción económica”. En poco tiempo todo el mundo se da cuenta del inmenso potencial de la Red para generar negocio. Aquí, las empresas periodísticas comienzan a darse cuenta de que no sólo hay que “estar” en la red con el periódico sino que se pueden ofrecer “nuevos servicios”, aprovechar la potencialidad del nuevo medio y obtener un rendimiento económico a medio y largo plazo creando nuevos productos. En la actualidad nos encontramos con la tercer fase, la “adecuación de contenidos”. Se hace evidente el axioma de “a nuevos medios, nuevos contenidos”. No se puede dotar a los nuevos medios de viejos contenidos. La red ya ha demostrado su poder de transmisión y capacidad de generar dinero, ahora que hay que potenciar la calidad de los contenidos que se envían por ella. si se crean nuevos productos es evidente que hay que dotarlos de contenidos y que esos contenidos han de responder a unos criterios mínimos de calidad y profesionalidad.
    Debemos tener muy claro que “periodismo” o “periodista” son términos que definen su profesión, mientras que el término “digital” define un soporte. Pero su importantes son los soportes y los medios, la clave de las nuevas fórmulas de información la tienen los contenidos. Si como señalaba anteriormente Jesús Canga Larequi , los públicos se están convirtiendo en elementos activos al poder elegir sus propios contenidos, este nuevo hábito de los usuarios ha de llevar también aparejada una redistribución del consumo de medios. El consumidor elegirá que parte de información quiere a través de cada uno de los diferentes medios y lo hará de forma selectiva, individualizada, lo cual, además de reforzar la idea de “complementariedad” entre nuevos y viejos medios, dará lugar, está dando lugar, a lo que hace tiempo se conoce como “información a la carta” o “personalización de contenidos”. Centrándose en el trabajo de los periodistas actualmente en activo en los medios tradicionales, uno de los riesgos que puede producirse es, menciona Jesús Canga Larequi, en torno al peso de cada sección, y de sus componentes, en las redacciones convencionales. Secciones con un peso específico dentro del periódico podrían pasar a la práctica desaparición y la creación de secciones nuevas a ritmo muy superior al normal.






2 comentarios:

  1. Flor, es interesante el tema que abordas pero podrías usar ejemplos cotidianos cuando narras las menciones de los autores, te ayudaría a que interpele en la reflexión del lector y tendría más fuerza tu escrito. Al margen, tenés algunos errores de tipeo.

    Gabriela Coronel

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  2. Flor, es interesante el tema que abordas pero podrías usar ejemplos cotidianos cuando narras las menciones de los autores, te ayudaría a que interpele en la reflexión del lector y tendría más fuerza tu escrito. Al margen, tenés algunos errores de tipeo.

    Gabriela Coronel

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