Marcelo Przylucki
Los discursos son nuestros vehículos para movernos por el
mundo. Pero también son un modo de regulación del pensamiento, de construir sentido,
de intencionalidad manifiesta más o menos elegante. Como todo producto humano,
su producción puede ser particular o, digamos, de tirada industrial. Asimismo,
los discursos son (lo sabemos) antes lectura que enunciado acerca de la
realidad que nos rodea pero (también lo sabemos) además tratan acerca de lo que
los medios nos dicen que nos rodea: no da lo mismo, por caso, hablar de
“vecinos” que de “ocupas” y en este tipo de decisiones son los medios los que
elijen qué palabras no pueden faltar en eso que nombramos como “lo que pasa”.
“¿No crea la prensa realmente cuestiones políticas y
sociales mediante la elección de noticias que hace día a día?”, postulaban
Maxwell McCombs y Donald Shaw hace casi 40 años presentando, más que una interrogación,
su hipótesis medular. Agenda setting
es la acepción que plantea el último de estos dos teóricos para referirse a ese
efecto producido por la acción de periódicos impresos y virtuales, la radio, la
televisión y los medios masivos de comunicación en su conjunto que deriva en la
iluminación y perfilado de ciertos tópicos que acabarán llenando las charlas
del almacén, el colectivo, los encuentros casuales por la calle. No está de más
recalcarlo: lo que no se comenta desde los medios es tan importante como lo que
sí. La agenda siempre recorta las partes de la realidad que le convienen para
armar la propia.
Recoger lecturas prestadas es un hábito, cuanto menos
peligroso atendiendo a que nota o informe trae consigo motivaciones históricas,
culturales e ideológicas propias. Para citar un contraejemplo a esta práctica
se puede recuperar la experiencia del portal de noticias NODAL, que nace a
partir de la recurrencia de los cables de agencias internacionales (con
predominancia europea y estadounidense) que replican la información que circula
en toda América Latina y el Caribe con sus perspectivas ideológicas e
históricas particulares. Fue el 1 de agosto de 2013 cuando nació, por
iniciativa del periodista especializado en asuntos internacionales Pedro
Brieger, este nuevo medio: su
originalidad hace pie en que los artículos publicados teniendo en cuenta las
distintas líneas editoriales de diversos medios para reconstruir así una
lectura más enriquecida acerca de los procesos y sucesos que se dan en
temáticas como integración regional, el devenir de los movimientos sociales y
los pueblos originarios, medio ambiente, género.
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